La Cumbre de las Américas… en la que no participan todas las Américas
Alexa Mata
Esta semana, del 6 al 10 de junio, se ha estado llevando a cabo la IX Cumbre de las Américas con sede en Los Ángeles, California y se ha organizado bajo el lema “Construyendo un futuro sostenible, resiliente y equitativo”.
Esta cumbre, que se ha realizado desde 1994 con una periodicidad aproximada de cada 3 años, consiste en la reunión de Jefes de Estado y de Gobiernos del continente Americano que hayan sido elegidos democráticamente y jefes de organismos internacionales dentro del marco de la Organización de Estados Americanos (OEA), lo que hace que esta asamblea sea de suma importancia ya que es la única que alberga a los máximos representantes de los países de nuestro continente; a esta reunión asisten presidentes con sus primeras damas u otros representantes de alto mando y se tiene el objetivo de crear foros de discusión sobre las problemáticas y desafíos a los que se enfrenta la ciudadanía de diferentes países en la época actual.
Para este año incluso líderes de pueblos indígenas de Ecuador y Perú se han unido a la cumbre con el propósito de recibir el apoyo de los demás países en el rescate de la selva amazónica.
El peso de la ausencia de México
Lo que más hemos escuchado las últimas semanas en nuestro país con respecto de la edición de el presente año es la ausencia de nuestro presidente Andrés Manuel López Obrador provocada por su desacuerdo con la exclusión de Cuba, Nicaragua y Venezuela, quienes por roces con Estados Unidos, por su falta de democracia y las violaciones a los derechos humanos vistas en estos países, no han sido invitados al evento. Cabe resaltar que la carta que creó estas cumbres especifica que serán reuniones que albergan únicamente a jefes de Estado que hayan sido elegidos mediante democracia, por lo que Estados Unidos no está actuando del todo incorrecto al no invitar a estas tres naciones.
Los argumentos del presidente Lopez Obrador consisten en que estos países también son parte del mismo continente y que tienen problemáticas que podrán ser tomadas en cuenta en la cumbre; asimismo dio a entender que Estados Unidos tiene una necesidad de “dominar sin razón” y le falta respeto por la soberanía de los demás países.
Andrés Manuel, a pesar de no asistir a los Angeles, envió a Marcelo Ebrard, quien representa a nuestro país en esta cita; sin embargo, siendo México un país tan importante de América y un socio comercial indispensable para Estados Unidos, AMLO está dejando un espacio vacío que ni la presencia de Ebrard podrá llenar.
Asimismo hubo otros países cuyo presidente apoyaba la misma postura de Andrés Manuel como Bukele de el Salvador, Arce de Bolivia, Xiomara Castro de Honduras o Giammattei de Guatemala, quienes también rechazaron la invitación a la cumbre como señal de protesta y se limitaron a enviar a sus cancilleres. Otros países como Argentina o Chile también mostraban desacuerdo con la postura de Estados Unidos, sin embargo lograron convencerlos para presentarse en Los Angeles.
A pesar de que la Casa Blanca trata de minimizar que hubo países que rechazaron la invitación a la Cumbre de las Américas llevada a cabo en su país, notas de El Times, por ejemplo, hablan de que se trata de una señal de que Estados Unidos está perdiendo hegemonía, que Joe Biden, presidente de los Estados Unidos está perdiendo liderazgo al igual que la capacidad de atraer a las demás naciones hacia sus intereses.
¿Qué sucede dentro de la cumbre?
Los temas principales de los que tratará la IX edición llevada a cabo en el 2022 incluyen la economía, que se ha visto fuertemente afectada en todo el continente como consecuencia del COVID-19, aunado al tema de la creciente inflación a la que nos hemos estado enfrentando en meses recientes; la inseguridad alimentaria que se plantea pueda ser combatida mediante reformas al Banco Interamericano de Desarrollo para alentar a la inversión privada; el urgente tema del medio ambiente que no deja de ser una prioridad a nivel mundial, aunque por lo general no se le da la debida importancia; se habla de la inclusión como tema prioritario, aunque algo irónico dadas las circunstancias y, por último, la migración, asunto crucial para Estados Unidos cuya solución se ve amenazada por la ausencia en a cumbre de Honduras, el Salvador, Guatemala y México, los países que envían casi el 70% del total de los migrantes a Estados Unidos.
Irónicamente hay una ola de 15,000 migrantes que salió de Chiapas el pasado lunes, moviéndose hacia Estados Unidos que incluye personas de Venezuela, México y el Caribe con la esperanza de que los resultados de la cumbre les favorezcan en su entrada al país de las oportunidades; sin embargo Joe Biden sigue catalogando a la migración ilegal como inaceptable a la vez que el gobierno del país expresa que no deben arriesgarse a moverse hacia los Estados Unidos puesto que la frontera se encuentra cerrada.
Panorama
Parece ser que los temas por los que originalmente se ha organizado la Cumbre de las Américas en su IX edición han quedado en cierta medida un plano secundario ya que han sido opacados por las controversias de aquellos países no invitados y de aquellos que desairaron la invitación; vemos a Marcelo Ebrard dando su discurso “consideramos que es un grave error y que nadie tiene derecho a excluir a otro” y vemos a miembros del gobierno estadounidense justificando los motivos por los que no se les hizo la invitación.
Sin embargo puede ser que de esta reunión salgan cosas buenas, haya acuerdos de resolución con respecto de los prioritarios asuntos del medio ambiente, la migración y la economía, que los países, ya sea que asisten o que no se comprometan a efectuar acciones en beneficio a sus ciudadanos, que se vea una colaboración real entre todos y que quede mucho aprendizaje para Estados Unidos sobre tomar decisiones de forma tan unilateral ya que parte de un buen liderazgo es ver los intereses de los demás y resolver efectivamente los desacuerdos.